Soplado – tipo manta
El soplado (tipo manta) consiste en el relleno de espacios horizontales y accesibles con aislantes fibrosos mediante medios mecánicos, como por ejemplo las buhardillas no habitables (no acondicionadas) y los falsos techos. AISLA SISTEM dispone de toda la maquinaria y accesorios necesarios para desarrollar esta actividad. Una gran cantidad de las viviendas actuales disponen de buhardillas no habitables o falsos techos que no contienen ningún tipo de materia aislante.
Le ponemos en contacto con un instalador de su zona. ¡Contacte con nosotros para más información!

Las Ventajas del Sistema de SOPLADO
Aislamiento térmico y acústico
AHORRO en la factura energética
Intervención por el interior o por el exterior (tejado)
No se pierde espacio útil en la vivienda
Sin andamios
Instalación limpia, rápida y económica
No es necesario licencia de obra
Comienzo de obra inmediato
MÉTODO DE APLICACIÓN DEL SOPLADO
La aplicación es fácil y sencilla, ya que en pocas horas puede tener el aislamiento instalado en su vivienda. Se realiza en diversos pasos:
1. Reconocimiento de la buhardilla o falso techo y preparación del suelo
El suelo debe estar en buen estado y resistir al peso del material aislante. También debe de ser suficientemente estanco al aire, en especial, no presenta orificios o fisuras abiertas entre los elementos susceptibles de perjudicar el aislamiento. Colocar listones de medida o marcas de referencia que nos permitan soplar el espesor deseado.
2. Colocación de la manguera de soplado
El acceso debe realizarse de la forma más segura, práctica y eficiente. En algunos casos podremos acceder por el tejado, quitando una o varias tejas y colocando la manguera desde el exterior, y en otras ocasiones tendremos que acceder por el interior de la vivienda.
3. Aplicación
El material se coloca por soplado neumático sobre la superficie del suelo o sobre el falso techo. El soplado se realiza empezando por las partes más alejadas y dirigiéndose progresivamente hacia el punto de salida. La aplicación debe prever el asentamiento del aislante, soplando el espesor correcto para obtener la resistencia térmica deseada por el cliente.